martes, 15 de octubre de 2013

ENAJENACIÓN MENTAL (¿TRANSITORIA?)






- ¿Está riendo o está llorando?
- Estoy tosiendo.
(Les Luthiers dixerunt)
  

En estos días, el ofuscamiento neuronal y la enajenación mental campan por sus fueros.

El Epigrafista confundió su spray capilar con el flus flus de pinrel y mejor no os cuento cómo acabó la cosa. Baste decir que cuando se dio cuenta casi había terminado las 100 cepilladas preceptivas (en qué estarías tú pensando).

La Madreconcarné está encantada de los nervios, lo que sólo se puede traducir en olvido del móvil, taquicardia permanente y necesidad de respirar profundamente antes de iniciar cualquier tarea que necesite de una mínima concentración (léase teclear, sin ir más lejos).




Futuras hijas mías:

1.- No sabéis lo que habéis desencadenado.

2.- Por otra parte, estáis sacando lo mejor de nosotros mismos. Sin ir más lejos, el Epigrafista llegó al punto de ofrecer generosamente el Eximio e Inaccesible Baluarte del Estudio, la Foránea Disertación y la Instrucción en General Solamente Accesible tras Superar las Mil Pruebas de la Sabiduría de Todos los Tiempos como habitación más adecuada para vosotras. No le tembló ni la voz. Vosotras no os hacéis una idea de lo que es eso. Como cederos un riñón a cada una. O más. (Si en casa veis unas esfinges flanqueando la puerta de una habitación, vosotras ni caso). 

3.- Lo bien que os lo vais a pasar haciéndole trenzas a vuestro padre.

2 comentarios:

  1. Andamos todos por el estilo, por lo que veo... Yo ya no sé ni dónde tengo la cabeza. Qué estrés... Besotes!!!

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