- “Mamá, ¿Qué hay para cenar?”
- “Puré rosa”
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| Así trituraba, así, así |
Esta es una invención maléfica de la Madreconcarné. Consistela Barbie. Creo que lo ponen de rancho en la cárcel de los Little Ponys. Pero como a la vista es tan resultón y tan sumamente rosa, nadie pone en duda su bondad hasta la tercera o cuarta cucharada.
- “No me sale un sabor rosa, me sale un sabor negro”- La Princesa Caradefresa se queda pensativa y entrecierra los ojos como para apreciar mejor los matices … -“Negro-marrón, marrón, como marrón, o como negro.”
Hijas mías: tres centímetros en poco más de cuatro meses. Ni se os ocurra dudar de mi sapiencia nutricionística.
Aaaaahh!! Puedes estar orgullosa de tus princesas. Esa respuesta la hubiese dicho su madre a la misma edad. Sin duda.
ResponderEliminarTío Tom
Si, creo que la transición de no comer nada a zamparme hasta el platillo con las vueltas fue como por esa edad. A decir de la Maestra.
ResponderEliminarEl orgullo materno me lo gasto por arrobas.
Jajajaja. Va para crítica culinaria. Me la imagino diciendo cosas como "Tiene un claroscuro de sabores". Besotes!!!
ResponderEliminar... próximamente, el fumet multicolor.
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